Poseidón

Griego antiguo Ποσειδῶν
Equivalente romano Neptuno
Padre Crono
Madre Rea
Tipo Dios Olímpico
Poseidón. El dios que reina sobre el mar, pero su dominio se extiende con todo aquello que sea acuático: aguas corrientes y lagos. En cambio los ríos poseen sus propias divinidades.

Iconografía de Poseidón

Se representa armado con el tridente, que es el arma por excelencia de los pescadores de atún, y montado en un carro arrastrado por animales monstruosos, mitad caballos mitad serpientes. Este carro se halla rodeado de peces, delfines, animales marinos de toda clase, de nereidas, y genios diversos.

Mitología de Poseidón

Posidón (Neptuno, en latín) es uno de los Olímpicos, hijo de Crono y Rea. Según las tradiciones, a veces se le considera el hermano mayor de Zeus, pero en otras el menor. La leyenda más antigua, que cuenta que Zeus obliga a su padre Crono a devolver los hijos que se había tragado, supone que Zeus es el menor de la progenie, del mismo modo que Crono, que destronó a su padre siendo el menor de los hijos de éste; sin embArgo, a medida que se fue desarrollando en Zeus el derecho de primogenitura y de sobiranía, pasó a ser el mayor. Es por eso que en las leyendas de la época clásica Posidón es considerado generalmente el más joven que su hermano.

Posidón fue criado por los Telquines y por Cefira, hija del Océano. Cuando llegó en la edad viril, se enamoró de Halia, hermana de los Telquinos, y le dio seis hijos varones y una hija llamada Rodó (esto ocurrió en la isla de Rodas, que tomó el nombre de la hija de Posidón).

Posidón no sólo tiene el dominio del mar, sino que también puede desatar tempestades, desquiciar las rocas de las costas con un golpe de su tridente, y hacer brotar manantiales. Desde los tiempos de la Ilíada, Posidón tiene asignado este dominio, como Hades reina en los Infiernos, y Zeus en el Cielo y la Tierra. Sus relaciones con Zeus no son siempre amistosas. Con Hera y Atenea, tomó parte en la conjura divina que tenía por objeto encadenar a Zeus.

Posidón participó durante un año, junto con Apolo y el mortal Éaco, en la construcción de la muralla de Troya. No obstante, creó un monstruo que salía del fondo del mar y asolaba los pueblos troyanos para vengarse de Laomedonte, que le había negado el salario convenido. Aquí empezó el rencor de Posidón hacia Troya -por eso intervino en la guerra a favor de los aqueos-. Sin embArgo, cuando éstos, en el principio de la Ilíada, deciden por consejo de Néstor fortificar su campamento rodeando los barcos con un muro, Posidón, en la asamblea de los dioses, protesta contra esta decisión, que estima susceptible de disminuir la gloria que había obtenido al construir la muralla de Troya. Durante cierto tiempo quiere permanecer al margen de la contienda, pero pronto sale en ayuda de los aqueos, que llevan la peor parte, y adopta la figura de Calcante para animar a los dos Áyax hasta que abandona la lucha por orden de Zeus. Pero cuando Aquiles está a punto de matar a Eneas, Posidón salva a éste (vela los ojos de Aquiles con una niebla, arranca del escudo de Eneas la lanza que se había clavado en él y transporta al héroe lejos de las filas amigas). El motivo que lo mueve a salvar a un troyano es que el Destino no quiere la muerte de Eneas, quizás porque Eneas no es descendiente directo de Laomedonte.

Cuando los mortales se organizaron en ciudades, cada cual tenía por costumbre acoger una divinidad para ser objeto de especial veneración. Pero ocurrían diversos conflictos entre dioses cuando dos o tres de ellos elegían la misma ciudad, que sometieron al arbitraje de sus pares o incluso al de mortales. En estos juicios, Posidón perdió casi siempre. Así, por ejemplo, en Corinto lo venció Helio; en Egina, Zeus; en Naxos, Dionisio; en Delfos, Apolo; en Trecén, Atenea. Pero las dos disputas más conocidas fueron motivadas por Atenas y Argo. Posidón había puesto la mirada en Atenas y había sido el primero en tomar posesión de la ciudad haciendo brotar, con su tridente, un "mar" en la cima de la Acrópolis -se trataba de un pozo de agua salada, según Pausanias-. Pronto se presentó Atenea, que plantó un olivo y luego reivindicó la sobiranía del país. Ante la disputa, el tribunal falló a favor de Atenea porque había plantado la primera el olivo en la roca de la Acrópolis. Posidón montó en cólera e inundó la llanura de Eleusis. En lo que concierne a la ciudad de Argo, se decidió a favor de la diosa Hera, y Posidón, preso de cólera, descargó su maldición sobre Argólide y secó todas sus fuentes. Gracias a Amimone, una de las Danaides, de quien se enamoró Posidón, la maldición quedó sin efecto, y la Argólida recuperó sus manantiales.

Posidón pasaba por haber tenido numerosos amores, todos ellos fecundos, como Zeus; pero mientras los hijos de Zeus eran héroes bienhechores, los de Posidón, como los de Ares, eran casi siempre gigantes maléficos y violentos: con Toosa engendró al cíclope Polifemo; con Medusa, al gigante Crisaor y al caballo alado Pegaso; con Amimone, a Náuplio; con Ifimedia, a los Alóadas. Cerción, el bandido Escirón, que fue muerto por Teseo y el cazador maldito Orión fueron hijos suyos. Los hijos que tuvo de Halia cometieron toda clase de excesos y su padre tuvo que sepultarlos bajo tierra para sustraerlos al castigo.

De Posidón se originan numerosas genealogías míticas, especialmente los amores de Posidón y Deméter, de los cuales nacieron una hija cuyo nombre estaba prohibido pronunciar, y el caballo Arión, que montaba Adrasto cuando la expedición de los Siete contra Tebas. Por otro lado, Posidón tiene una esposa "legítima", la diosa Anfitrite, una nereida, de la que no tuvo hijos.

El culto a Poseidón

Posidón era señor de una isla maravillosa: la Atlántida. Era el protector de los navegantes: en un combate naval, era él quien decidía qué grupo humano debía ganar. También recibe el culto de muchos lugares eminentemente marineros, de la costa, sobre todo en Súnium, Ática.

volver arriba